Ya es Navidad, Charlie Brown!

El mes de diciembre se llama Navidad.

Cada año la Navidad empieza antes para bien o para mal. A medida que se acerca el invierno empezamos a ver las primeras señales en los escaparates, los anuncios de juguetes dan paso a los de perfumes y un día los gritos de los habitantes de tu ciudad te sorprenden cuando arranca el alumbrado navideño.

Todo el mundo está pensando en regalos, vacaciones, familia y otros gastos. Además de llegar cargada de buenos deseos, la Navidad es un evento comercial para el que todo negocio debe prepararse.

Si estás a punto de que te pille el toro, aquí van algunos consejos para enviar tus felicitaciones o preparar tu campaña navideña.

Analiza tu público objetivo

Para dirigirte a tus posibles clientes, tienes que conocerlos. Tus clientes habituales ya son una pista, pero no te cierres a nuevas oportunidades. Recuerda que el público determina el mensaje y no es lo mismo dirigirte a adolescentes que a padres. O a padres adolescentes.

Y establece objetivos si se trata de una campaña, ya que si no luego, no podrás medirlos.

Elige los canales

Tal vez quieras estar en el buzón de todas las casas, pero a día de hoy las felicitaciones también pueden ser digitales y por lo tanto te ahorras los sellos. Herramientas como Mailchimp te permiten el envío masivo de correos electrónicos a los clientes y personas que te hayan cedido tus datos. Siempre con un diseño cuidado, claro. Procura no ser pesado y que el mensaje sea útil y original.

Presenta también tu campaña navideña en redes sociales como Facebook, Twitter, Pinterest, Google+, etc. No es necesario que estés en todas ni tampoco a todas horas. Basta con lanzar los mensajes adecuados en los horarios en los que tus clientes se conectan a ellas. Te recomiendo que programes tus mensajes con herramientas de gestión de redes sociales como Hootsuite, ya que incluso en su versión gratuita te permite llevar un buen control de las mismas. Permíteme que insista: procura no ser pesado programando mensajes.

Adapta el mensaje

Un mismo mensaje funciona de maneras distintas según lo envíes por email, lo cuelgues en Facebook o lo entregues en mano. Adapta tu felicitación o tu campaña de publicidad para que se vea y se entienda de forma correcta allí donde vaya a ser visto.

¡Sé creativo!

Tal vez sea redundante, pero vamos a recibir millones de mensajes, felicitaciones y campañas navideñas con gorros de Papá Noel, paisajes nevados, velas y estrellas. Hay cosas que son inevitables, pero procura que tu diseño se adapte a lo que ofreces para romper las expectativas.

Analiza el retorno

El feedback o retorno es importante para asegurarnos de que nuestro mensaje ayuda a nuestra marca.

En el caso de una felicitación, no esperamos una respuesta directa, pero sí que visiten tu página web. En una campaña navideña es esencial para asegurarnos de que el mensaje llega, es leído y funciona según sus objetivos. Los objetivos no tienen porque enfocarse sólo a ventas, también pueden ser aumentar el tráfico a nuestra web, u obtener determinado número de seguidores en Facebook. Define y vencerás.

 

Ya es Navidad, Charlie Brown

La Navidad está a la vuelta de la esquina y puede que no sea tu época favorita del año. Tal vez te pase como a Charlie Brown (Carlitos), un personaje inseguro y deprimido que cada Navidad se angustia. Pero en el fondo, la Navidad sólo es otra oportunidad para hacer las cosas bien. 😉

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